La sociedad colombiana evidencia un muy bajo índice de publicaciones universitarias, en un afán del gobierno por superar ésta dificulta implemento una estrategia errada, la cual genero un montón de papeles arrumados, mal escritos, que no aportan nada nuevo y que nadie lee, se intentó corregir ésta estrategia implementada para así poderle dar solución al problema, pero éste intento de corregir, quedó solo en eso “en intentos” ya que fue inútil.
Pablo Arango nació en Bogotá, 1975 es profesor de filosofía en la Universidad de Caldas, su último libro se titula De la belleza y otros caprichos de conservador.
Según Colciencias, solo en el área de “ciencias humanas” hay actualmente 96 revistas especializadas en Colombia, se supone que estas publicaciones tienen como fin principal mostrar las ideas y descubrimientos de los investigadores, eruditos, críticos y demás miembros de una comunidad universitaria, es de gran importancia resaltar que la publicación de libros por parte de la comunidad universitaria son muy pocos, y en la prisa del gobierno por acrecentar la producción de textos académicos universitarios, expidió el Decreto 1444 el cual establecía que daría benéficos principalmente un aumento de sueldo a los profesores universitarios que realizaran publicaciones con fines académicos, ésta estrategia implementada fue errada ya que los profesores publican única y exclusivamente por el beneficio que otorgaba dicho decreto y no les importaba para nada el contenido de dicha publicación.
Estas publicaciones desinteresadas en su contenido y con poca esencia de un texto académico, textos tan malos, eran tan malos que realmente eran un montón de papeles arrumados, mal escritos, que no aportan nada nuevo al conocimiento y por consiguiente nadie leía.
Creo que ésta errada estrategia implementada por parte del gobierno se debió principalmente al poner el factor económico y comercial por encima del pensamiento crítico y constructivo, soy de las personas que piensa que cualquier rubro relacionado con el aprendizaje y conocimiento no debe estar condicionado por ningún factor diferente a la ganas y motivación que nos impulsan a investigar, analizar, criticar y comentar acerca de un tema.
Para corregir éste problema que se originó con la expedición del decreto 1444, se expidió el decreto 1279, el principal cambio que introdujo esta norma consistió en imponer algunas reservas en cuanto a los escritos que un profesor puede presentar para obtener dichos beneficios tales como el aumento de sueldo, las reformas del nuevo decreto buscaban suprimir la premiación de basura que fue característica del decreto anterior, pero no se logró ya que se genero otra nueva burla evidente a éste sistema, la burla es que los que calificaban los escritos de los profesores también presentaban escritos los cuales eran calificados por aquellas personas a las cuales ellos le habían calificado sus escritos anteriormente, ante esta situación se creó una “alianza” entre éstas personas (daban puntajes altos cuando calificaban escritos, para que asi mismo les dieran puntajes altos en los escritos de ellos), esto se convirtió en un círculo vicioso.
Es claro y evidente que implementar estrategias apresuradas, genera más problemas que el problema que se intenta resolver, uno de los problemas que se formo con la implementación de ésta estrategia por parte del gobierno fue que estos escritos eran desechados por la sociedad, aunque esto era de esperarse ya que con textos tan pobres en su contenido, sin objetivo claro; “publicaciones como el acta de una reunión, como lo hecho en una clase” resulta demasiado irrisorio al saber que los textos esperados eran textos académicos, es lógico que textos como éstos tenga muy pocos lectores como sucedió con las publicaciones de dichos profesores universitarios. Considero que la reacción de las personas frente a estas publicaciones universitaria es entendible, y es natural esperar dicha reacción ya que un texto con muy baja calidad que carece de estética y arte no motiva a las personas a leerlo.
Colombia evidencia una baja producción es textos académicos y se implementó una estrategia la cual fue totalmente errada, en nuestras palabras coloquiales resultó peor la cura que la enfermedad ya que se creó un verdadero caos en cuanto a escrito y lectura de éstos escritos se refiere.
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